El Parque Natural Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas impresiona al visitante por su relieve escarpado de media montaña. Las paredes rocosas de gran altura se entremezclan con profundos valles y frondosos bosques de pinos laricios. Entre sus picos destacan el de Empanadas y Cabañas con más de 2.000 metros de altitud, siendo el del Yelmo uno de los más frecuentados para la práctica del vuelo libre.
El agua, protagonista en Cazorla
El agua es otro de los elementos protagonistas de este espacio natural, el de mayor superficie protegida de España con sus 209.920 hectáreas. La extensa red hidrográfica existente permite, no sólo disfrutar de una gran variedad de flora y fauna, sino también realizar numerosas actividades: un paseo en barca por el embalse del Tranco, senderismo junto al río Borosa, conocer los nacimientos del Guadalquivir y el Segura o el salto de agua de Chorro Gil.
Naturaleza y fauna en estado puro
Otro atractivo del lugar son sus plantas y animales, fáciles de ver en el espacio. En lo alto de los roquedos se puede contemplar el vuelo del águila real y el buitre leonado .Al adentrarse en el interior del bosque, el visitante descubrirá bosques de pinos laricios, negrales o carrascos salpicados de encinas, robles y áceres. Con suerte, disfrutará de alguna de las decenas de especies exclusivas del lugar como la violeta de Cazorla o la lagartija de Valverde. Una representación de la flora más singular de este espacio se encuentra reunida en el jardín botánico de Torre del Vinagre, ubicado en la carretera del Tranco (A-319).
Monumentos de interés en Cazorla
El Parque Natural Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas es algo más que naturaleza. El paso de civilizaciones tan dispares como la íbera, romana o árabe han dejado una huella en sus poblaciones que no hay que dejar de visitar. Destacan las plazas y callejones de Cazorla, municipio escoltado por la sierra de los Halcones; el castillo de la Iruela, la necrópolis ibérica de Toya en Peal de Becerro y la villa romana de Bruñel.